Vivir a dos pasos de la Plaza del Prado y del Passeig de les Germaníes es disfrutar de la Gandia más viva sin renunciar a la tranquilidad. Este piso, situado en una séptima planta con ascensor en un edificio de vecindario familiar y zaguán renovado para facilitar el acceso a personas con movilidad reducida, queda a solo 200 metros de la gran plaza peatonal del Prado —epicentro de ocio y restauración, con zona infantil y agenda de eventos— y del arbolado Passeig de les Germaníes, donde se concentran comercios, cafeterías y el Teatro Serrano y desde el que se accede cómodamente al centro histórico, las calles comerciales San Francesc de Borja y Major, el Palau Ducal dels Borja, el Ayuntamiento y la Plaça dels Colomets.
La calle del edificio, sin embargo, es tranquila y poco transitada, perfecta para descansar. La vivienda suma 66 m² muy bien aprovechados: al entrar, un primer dormitorio; a continuación, el baño reformado con plato de ducha; el corazón de la casa es el salón, que integra el antiguo balcón para ganar amplitud y luce un gran ventanal con vistas despejadas sobre los tejados del entorno, lo que aporta luz y silencio al no dar directamente a la calle. Junto al salón se encuentra el segundo dormitorio, también luminoso y con las mismas vistas, y enfrente el tercer dormitorio, separado de la cocina por un amplio ventanal biselado que asegura privacidad: puede utilizarse como dormitorio, despacho o zona de office según convenga. La cocina es independiente, conserva una distribución cómoda y funcional y resulta ideal para actualizarla a tu gusto.
El edificio es cuidado y sereno, y los gastos de comunidad son de 50 € al mes con el consumo de agua incluido. En definitiva, una oportunidad para vivir el centro de Gandia con todo a mano —cultura, comercio y zonas verdes— en un piso alto, luminoso y silencioso que puedes personalizar con pequeñas mejoras estéticas.